Hace un año exacto que el Presidente Sebastián Piñera, junto a la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt, lanzaron en La Moneda el programa Estado Verde, cuyo objetivo es incorporar buenas prácticas ambientales en todos los poderes del Estado para el cuidado de nuestro planeta. El éxito de la iniciativa ha sido tal, que en la actualidad 51 instituciones se encuentran trabajando en incorporar políticas de sustentabilidad en sus procesos internos.
El eje central es generar un cambio en la cultura ambiental, y que los trabajadores públicos sean activos participantes en el proceso, apoyando con medidas tan simples como apagar la luz, hasta el desarrollo de iniciativas que mejoren la eficiencia y disminuyan los impactos ambientales. Se espera que a través de los 440 mil funcionarios del Estado se avance en la reducción del papel y del consumo de agua. Por ejemplo, si en la actualidad se usan al año más de 5 millones de resmas de papel, con la incorporación de nuevas medidas se podría rebajar en un 30% su uso, lo que generará un gran alivio para el Planeta.
Buenas prácticas que destaca en encargado de la Unidad de Servicios Generales de la Subsecretaria de Economía, Rodrigo Alfaro: “Hemos implementado puntos de reciclajes para tres de nuestras 4 plantas a nivel central, considerando separar de los residuos en general, latas, vidrios, plásticos y cartones. Además se ha comprometido como gran desafío para el transcurso del año de desarrollo del plan, la disminución de un 3% en el consumo agua y electricidad por funcionario en de nuestra institución”.
Misma situación que señala el Jefe del Departamento de Personal del Senado, Carlos Becerra: “El Senado se propuso un plan de 20 medidas a implementar durante el año 2020 y 2021, como por ejemplo, establecer una Política Interna de autogestión ambiental; reducción del uso de papel, e implementar un sistema integral de gestión de residuos”
Cada una de las instituciones cuenta con un Comité Estado Verde, integrado por funcionarios del servicio, cuya tarea es sugerir la aplicación de medidas e incentivar al resto de los trabajadores. Una condición que destacada Rodrigo Alfaro en Economía, “han comenzado surgir iniciativas de algunos funcionarios, tales como el reciclaje de tapas plásticas y planes para incentivar el buen uso de la electricidad a través de campañas de auto gestión para funcionarios en la utilización de equipos electrónicos”.
En pleno régimen se podría disminuir en 12 mil toneladas los gases de efecto invernadero o huella de carbono, es decir un 10% del consumo actual de electricidad. Y se pretende ahorrar un 22% en el consumo de agua, lo que equivale a 409 piscinas olímpicas; y respecto del uso en papel, la meta es disminuir un 30% del total, lo que sería igual a conservar 91.588 árboles de Quillay.
Sin embargo, el cornavirus ha puesto algunas trabas al desarrollo del programa, “evidentemente que la pandemia ha afectado de manera importante la implementación del plan de medidas, sin embargo seguimos trabajando a distancia en las que si se puede avanzar para no perder el espíritu”, reconoce Carlos Becerra del Senado.
Una vez se haya superado la pandemia, seguramente los Comités Estado Verde retomarán el trabajo para llevar la sustentabilidad al interior de cada institución. Asimismo, se espera que para el segundo semestre el ingreso de 10 nuevas instituciones, porque, pese al COVD19, el interés por ingresar al sistema se mantiene inalterable.